Una baja autoestima constituye el conjunto de sentimientos, percepciones y conductas negativas hacia uno mismo, que construimos las personas a partir de la interacción con los demás y con el entorno.
Los niños/as o adolescentes con baja autoestima se centran en lo negativo de sí mismos, se sienten incapaces de afrontar las adversidades o las situaciones cotidianas y suelen depender en exceso de la aprobación de los demás, especialmente de sus figuras de referencia. Algunos niños/as actúan de manera pasiva para pasar desapercibidos, evitando expresar sus opiniones o emociones, mientras que otros, se muestran agresivos y permanentemente a la defensiva ocultando sentimientos de tristeza y una posible sensación de inferioridad.
Normalmente no existe una única causa que explique la baja autoestima en una persona, sino que suele producirse como consecuencia del conjunto de varios factores, como la vivencia de situaciones difíciles o estresantes, sentimientos de ser “diferentes”, falta de apoyos sociales, excesiva timidez, sensación de no poder cumplir las expectativas propuestas, etc.
Los siguientes síntomas pueden ayudarte a detectar si tu hijo/a presenta una baja autoestima:
- Con frecuencia evita enfrentarse a aquellas situaciones que le provocan miedo o ansiedad y depende en exceso del apoyo del adulto.
- Puede presentar conductas de perfeccionismo, pero enseguida se frustra y abandona si no consigue lo que se propone.
- Suele presentar mal perder en los juegos, y cuando gana, necesita hacérselo saber a los demás o, por el contrario, no se lo cree y piensa que ha sido fruto del azar.
- Muestra una baja tolerancia a la frustración.
- Necesita que le digas continuamente qué debe hacer y cómo debe hacer las cosas.
- Puede precisar llamar la atención de los demás constantemente, aunque ello implique reprimendas o castigos.
Una baja autoestima mantenida en el tiempo produce sentimientos tales como angustia, desánimo, vergüenza, culpabilidad, miedo, ansiedad y, en el peor de los casos, puede llegar a ocasionar una depresión. Los niños/as y adolescentes que se ven limitados en sus vidas a causa de una baja autoestima pueden disminuir su eficacia académica y presentar desmotivación que, a la larga, puede dar lugar a fracaso escolar, o por el contrario, pueden desarrollar excesivos niveles de autoexigencia y comparaciones continuas con los demás. Además pueden desarrollar timidez y ansiedad social.
Si crees que tu hijo/a puede estar viviendo esta situación consúltanos y valoraremos qué causas pueden estar motivando y manteniendo en el tiempo su baja autoestima. El tratamiento irá encaminado a dotar a la familia de las pautas necesarias para fomentar en tu hijo/a una autoestima ajustada y, a él/ella le ayudaremos a:
- Conocerse, aceptarse y quererse
- Identificar y potenciar sus virtudes e indagar y trabajar sobre sus áreas de mejora
- En definitiva, ser más felices de forma integral
- Expresar sus emociones y canalizarlas de manera adecuada
- Ser compasivo consigo mismo/a sin negar la realidad, pero de manera realista
Todos los artículos que aparecen la web pertenecen a Paz de Roda Centro de Psicología y están protegidos por los derechos de autor y normativas concordantes. Su uso está limitado a la lectura, no pudiéndose explotar, reproducir ni difundir sin señalar la fuente y sin pedir autorización expresa al centro.