Las relaciones sociales son una de las áreas más importantes en la vida de las personas. Suponen una fuente de bienestar, compañía, afectividad y apoyo. Son un espejo que nos devuelve una imagen de nosotros mismos. Nos permiten vincularnos y recrear nuestras necesidades de apego y pertenencia. Y nos garantizan tener una vida exitosa a nivel personal y a nivel profesional. Sin embargo, en ocasiones, pueden verse perturbadas.
Quizá interactuar con otras personas te genera ansiedad, eres muy tímido/a, o puede que tengas miedo al rechazo o al abandono. Puede que sientas que no tienes suficientes habilidades sociales o tengas dificultades para crear y mantener amistades. O tal vez estés satisfecho con tus relaciones, pero sientas pavor a hablar en público y esto te limite en tu desarrollo personal o profesional. Cualquiera de estos aspectos mencionados conlleva incomodidad e interfiere en la propia satisfacción vital, a veces hasta el punto de evitar las situaciones con otras personas e ir aislándose poco a poco.
Las personas con ansiedad social suelen tener miedo a no ser lo suficientemente inteligentes, o interesantes, o divertidas o cultas.
Y eso les lleva a relacionarse con temor, esperando el rechazo o el ridículo. Comúnmente la persona tiene la anticipación de que su competencia social no va a ser buena en un evento social determinado, lo que le lleva a sufrir ansiedad. Hasta el punto de evitar dicho evento. O por el contrario, a exponerse al evento pero con inquietud, estando muy consciente de su actuación (¿lo hago bien? ¿estoy diciendo cosas convenientes? ¿le estoy cayendo bien?) y leyendo las conductas del otro (¿ha bostezado porque se aburre conmigo? ¿está callado porque le resulto insulso?). Todo ello puede llevar a inhibirse en las relaciones sociales, a utilizar la verborrea como medio de afrontamiento o a tener déficits en la conducta (como sonrojarse o trabarse al hablar).
Relacionarse con los demás suele conllevar un aprendizaje que dura prácticamente toda la vida. Tenemos que tener en cuenta que cada uno partimos de nuestro marco de referencia y que éste es único, por lo que cada uno tendremos nuestra propia forma de estar en el mundo y de acercarnos al otro.
Si te encuentras en esta situación, no dejes que te condicione la vida. Podemos ayudarte a disminuir el malestar y a que adquieras las herramientas necesarias para poder manejarte mejor en tus relaciones sociales, tanto personales como profesionales. Para ello revisaremos desde dónde te relacionas, te enseñaremos a gestionar la ansiedad y a poder hacer frente a aquellas situaciones que tiendes a evitar, con el objetivo de que poco a poco vayas adquiriendo nuevos patrones relacionales que te reporten satisfacción y bienestar.
Las relaciones sociales son una de las áreas más importantes en la vida de las personas. Suponen una fuente de bienestar, compañía, afectividad y apoyo. Son un espejo que nos devuelve una imagen de nosotros mismos. Nos permiten vincularnos y recrear nuestras necesidades de apego y pertenencia. Y nos garantizan tener una vida exitosa a nivel personal y a nivel profesional. Sin embargo, en ocasiones, pueden verse perturbadas.